¿Cómo saber si mi bebé recién nacido esta deshidratado?

Manos frías del bebé

Enfermedades como la diabetes, los vómitos, la diarrea, los golpes de calor o la fiebre aumentan el riesgo de deshidratación (NHS Choices, 2017). Las afecciones que dificultan la ingesta de líquidos (como el dolor de garganta) también pueden poner a los niños en riesgo de deshidratación (Kids Health, 2017).

Los bebés alimentados con leche artificial pueden tomar sorbos de agua hervida y fría en un pequeño vaso o biberón, además de su leche artificial habitual. Puede que se comporten como si tuvieran hambre, pero si luego rechazan la toma, puede ser que en realidad tengan sed.

Puede que pases calor y sudes cuando cojas a tu bebé para darle de comer, pero no te sientas avergonzada: muchas de nosotras hemos pasado por eso. Puedes colocar un trozo de muselina entre tu cuerpo y el de tu bebé para que ambos estéis más cómodos.

Si está deshidratado, pero no está clínicamente deshidratado o tiene un mayor riesgo de deshidratación, continúa con la alimentación infantil de forma normal y añade líquidos adicionales (NICE, 2009). En cuanto a los líquidos adicionales, limítate al agua e intenta evitar las bebidas con gas o los zumos de frutas.    Sigue dando a tu hijo pequeños sorbos de líquido y haz que beba más gradualmente si puede. Puedes utilizar una cuchara para facilitar la tarea (NHS Choices, 2017).

Síntomas de deshidratación

La deshidratación grave es una emergenciaSi tu bebé muestra signos de deshidratación grave: Llévalo a urgencias inmediatamente. Los bebés pueden deshidratarse peligrosamente con rapidez, por lo que es importante actuar con rapidez.

El médico también querrá averiguar por qué está deshidratado tu bebé y tratar el problema subyacente. En el caso de los vómitos, por ejemplo, puede recetar un medicamento contra los vómitos. Si tu bebé tiene diarrea y el médico cree que está relacionada con la dieta, puede recomendarte que le cambies la leche de fórmula o que modifiques tu dieta si le das el pecho.

Si el médico te recomienda líquidos electrolíticos, puedes encontrarlos en la mayoría de las farmacias. Pedialyte, Infalyte y ReVital son algunos de los productos de marca. Pregunta a tu farmacéutico por las marcas genéricas también.

El médico de tu bebé puede darte instrucciones sobre el uso de líquidos electrolíticos, en función del peso y la edad de tu bebé. La Academia Americana de Pediatría ofrece aquí unas directrices generales sobre la cantidad de solución total que debe administrarse al niño durante 24 horas.    Por ejemplo, un bebé de 7 libras con diarrea leve necesitaría al menos 16 onzas de solución electrolítica, mientras que un bebé de 22 libras necesitaría 40 onzas. El líquido puede administrarse lentamente, sorbo a sorbo, cucharadita a cucharadita, usando una cuchara o jeringa.

Cómo saber si está hidratado

El cuerpo de tu bebé está formado por aproximadamente un 75% de agua, que es un componente de cada célula. Es vital para el control de la temperatura, el mantenimiento de la salud de los órganos y tejidos, el transporte de nutrientes a las células, etc.

Hay varias cosas que pueden alterar el equilibrio entre el agotamiento y la reposición. Por ejemplo, si el bebé vomita o tiene diarrea, perderá líquido más rápidamente que cuando está bien, lo que puede provocar una deshidratación.

La deshidratación en los recién nacidos y los lactantes pequeños suele ser el resultado de no ingerir suficientes líquidos para reponer los que se pierden a lo largo del día.Los lactantes mayores y los niños tienen más probabilidades de deshidratarse a causa de una enfermedad que los recién nacidos.

El tratamiento de la deshidratación infantil depende de la causa y la gravedad de la enfermedad y de la edad del bebé. En el caso de los recién nacidos o de los bebés de menos de 3 meses, es probable que el médico quiera ver al bebé para hacerle una revisión. Si la diarrea u otra enfermedad o afección se prolonga, es probable que el médico quiera ver al bebé independientemente de su edad.

Síntoma de deshidratación del bebé

Los bebés y los niños son más susceptibles a la deshidratación, que puede ser causada por no beber líquidos o por diarrea intensa, vómitos o fiebre. Cuando el cuerpo no tiene suficientes líquidos para funcionar correctamente, puede causar daños importantes a su hijo.

Los médicos y el personal de apoyo del Rocky Mountain Hospital for Children (RMHC) son expertos cercanos que pueden ayudar a tratar la deshidratación, así como ayudarle a reconocer los signos de deshidratación en los niños. Usted es quien mejor conoce a su hijo, y si nota que algo puede ir mal, estamos aquí para ayudarle.

Cada niño, al igual que cada caso de deshidratación, es único. La deshidratación en los niños puede ser leve, moderada o grave. Además de la gravedad, la deshidratación en los niños se presenta sobre todo en tres variantes:

Los signos de deshidratación en los niños suelen depender de cada caso. Si su hijo experimenta alguno de los síntomas que se indican a continuación, puede ser el momento de considerar la posibilidad de llevarlo a un servicio de urgencias pediátricas.

Hay varias formas de saber si su hijo está deshidratado. En la deshidratación se observa una disminución de peso, pero puede ser difícil de medir día a día. Una serie de hallazgos físicos junto con el historial clínico pueden ayudar a evaluar la gravedad de la deshidratación. Estos hallazgos incluyen el pulso del niño, la presión arterial, la turgencia de la piel, el aumento de la sed o el letargo y la disminución de la producción de orina.