Contenidos
Mi bebé tiene un ojo vago, ¿se le quitará?
Tener una mirada bizca es muy típico en los recién nacidos. Normalmente, la aparición de ojos bizcos en los recién nacidos no es nada preocupante. Suele ser el resultado de una coordinación ocular poco desarrollada o de pliegues cutáneos que hacen que parezca que el bebé tiene los ojos cruzados cuando no es así.
Sin embargo, si un bebé mayor tiene los ojos desviados, es posible que haya algo más, como una afección ocular conocida como estrabismo (cuando los músculos del ojo no funcionan correctamente). En este artículo se explican las causas y el tratamiento de los ojos cruzados en los bebés y cuándo hay que acudir a un profesional sanitario para que los evalúe.
Hay varias razones por las que la aparición de los ojos cruzados se produce en los bebés recién nacidos. Una de ellas es que a veces los bebés nacen con pliegues de piel adicionales en las esquinas interiores de los ojos, lo que les da una apariencia de ojos cruzados. Sin embargo, a medida que estos bebés crecen, estos pliegues empiezan a desaparecer.
Otra razón por la que los ojos de un recién nacido aparecen cruzados de vez en cuando es la falta de desarrollo en esta etapa. Por lo tanto, es habitual que los ojos de un recién nacido se muevan de forma independiente el uno del otro.
El bebé sale bizco en las fotos
Si el estrabismo no se trata, el cerebro acabará por ignorar la imagen del ojo más débil, provocando ambliopía, también conocida como “ojo vago”. Más que el nombre, la ambliopía es una pérdida de visión permanente que no puede corregirse con gafas o lentes de contacto. Sin embargo, si el estrabismo se detecta a tiempo, los niños pueden curarse y proteger su visión mediante una serie de opciones de tratamiento seguras y eficaces, entre ellas: La eficacia de estas opciones de tratamiento depende de la gravedad de la afección del niño y de la rapidez con que se reconozca y aborde. La buena noticia es que, si se trata a tiempo, el estrabismo puede curarse y evitar la pérdida permanente de visión.
Cómo saber si tu bebé tiene los ojos cruzados
Si el ojo de tu bebé está muy lloroso y tiene alguna secreción, probablemente se trate de un conducto lagrimal obstruido. Esta afección, también conocida como “ojo pegajoso”, suele mejorar por sí sola, pero no está de más que lo consultes con tu médico.
Si los ojos de tu bebé se enrojecen, hinchan o duelen, con una secreción amarilla o verdosa que puede hacer que sus párpados se peguen, es posible que el ojo esté infectado. Esto se llama conjuntivitis. Siempre debe acudir al médico si cree que su hijo tiene una infección ocular. Es posible que necesite un colirio o una pomada antibiótica.
Las lágrimas son producidas por las glándulas situadas en el interior de los párpados superiores sobre cada ojo. Fluyen sobre la superficie del ojo y drenan hacia una pequeña abertura en la esquina interior de los párpados superior e inferior. A continuación, las lágrimas fluyen por el conducto lagrimal hacia la nariz.
Si el conducto lagrimal obstruido no mejora, el médico puede enseñarle un masaje especial para ayudar a desplazar la obstrucción. Algunos bebés necesitarán una intervención quirúrgica, con anestesia general, para que el médico pueda abrir el conducto lagrimal con una sonda.
Cómo arreglar los ojos bizcos de forma natural en los bebés
La secreción amarilla en los ojos (conocida como “ojos pegajosos”) es habitual en los recién nacidos y los bebés pequeños. Normalmente, los ojos de tu bebé mejoran por sí solos. Debes decirle a tu médico de cabecera o a la enfermera de la sanidad pública que tu bebé tiene los ojos pegajosos la próxima vez que lo veas. Los ojos rosados o rojos son un signo de que tu bebé puede tener conjuntivitis, por lo que tendrás que llevarlo al médico de cabecera.Conjuntivitis en bebés y niñosTratamientoTendrás que limpiar los ojos de tu bebé si se le han formado costras y tiene problemas para abrirlos. Su médico de cabecera puede remitirle a un especialista si el ojo de su bebé sigue pegajoso después de 12 meses.InfecciónA veces el conducto lagrimal de su bebé puede obstruirse y contraer una infección.